viernes, 28 de septiembre de 2012

Carta Al Corazón


Esa mañana se había despertado más antes que de costumbre.
Su corazón la molestaba y su cabeza le decía que ya no podía más. Pensamientos que nunca recorrieron su mente ahora le zumbaban en la cabeza como miles de molestosas abejas. Dio vueltas en la cama, tratando de olvidar como siempre lo hacía, y era verdad, siempre olvidaba con facilidad aquellas cosas que no le eran agradables. Pero esta vez no. No podía sacárselo de la cabeza ¿De dónde salió este intruso sentimiento que la atormentaba y que la había puesto a prueba hace días? 
Después haber luchado por dormirse, se incorporó en su cama y vió, del otro lado de la habitación, a aquel sentimiento, sentado, esperando, pero ¿Qué esperaba? 
Se dirigió hasta él y le hizo sólo una pregunta ¿Cómo llegaste a entrar en mi mente? 
El sentimiento la miró y le dijo: -Yo estuve siempre dentro tuyo, crecí con vos, viví con vos. Estuve escondido en un pequeño rincón de tu rígido corazón,el cual sólo pocos han logrado penetrar, esperando para salir en el momento adecuado.
Intenté salir antes, forzando esas duras paredes en las que me encerraste, pero fracasé.
Pero esta vez, estoy dispuesto a luchar y te advierto que ya logré salir.- El sentimiento prosiguió: -No es posible que me sigas evitando, la vida avanza, se va pasando y con ella tus pensamientos y sentimientos pero yo aparecí en tu vida y quiero cambiarla, sólo deja de ignorarme.-
Ella retrocedió asustada, con los ojos empapados y el corazón confundido, volvió a su cama esperando despertar de ese absurdo sueño pero no había sido un sueño, el corazón le había ganado a la mente.

viernes, 21 de septiembre de 2012

That Blind Girl


El Receso

Mientras las gotas resbalaban por la ventana, ella miraba hacia el horizonte.
Se había tomado un respiro de la ciudad, de los ruidos, de las personas, pero lo curioso era que había estado pensando en personas desde que llegó a esa especie de casilla, colocada en la cima de un pequeño relieve.

Llovía, la casilla lucía acogedora y todo parecía estar perfecto, pero a ella le faltaba algo, cuando de repente recordó lo que le había pasado la semana anterior, lo que la había hecho sentirse tan distinta, lo que la había hecho sentirse alejada de sí misma como nunca se había sentido antes.

Recordó esa mirada que la hizo sentirse tan segura, se arrepintió de haber actuado tan tímidamente y deseó poder regresar a aquel momento y hacer bien las cosas, pero la realidad golpeó su mente y llovía más fuerte cada vez, las lágrimas en sus ojos no la dejaban ver bien pero alcanzó a divisar fuera de la casilla, caliente y confortable, la silueta de su recuerdo esperándola, a que se arriesgara a mojarse con la fuerte lluvia que amenazaba con sacarle la protección de su cómodo refugio.